Pese a la incertidumbre suscitada el pasado veintiuno de setiembre, cuando se rumoraba el impedimento de las procesiones y luego se revirtiera tal cosa, la comunidad devota de Camoapa se ha desbordado por las calles de la ciudad, acompañando a la imagen del santo de Asís en sus recorridos tradicionales del novenario y el tope.

Este lunes tres de octubre Camoapa escenificó una muestra extraordinaria de devoción, cual si fuera una forma de decir que prevalece la voluntad del pueblo creyente y no la de quienes pretenden la inmovilidad religiosa. Temprano las personas se reunieron en el sector conocido como El Tablón, desde donde partió el tradicional tope en honor a San Francisco de Asís.

La primera estación de la imagen del santo fue frente a las instalaciones del hospital San Francisco, ubicado en el primer tramo del recorrido de la procesión. De ese lugar, el mar de personas se movió lentamente por las principales calles de la ciudad hasta llegar al templo parroquial San Francisco de Asís.

Imagen del santo patrono en las instalaciones del hospital San Francisco

En la parte frontal del tope iba una carroza con las reinas de la fiesta patronal, seguida de los estandartes de la iglesia y la Orden Franciscana. Cinco bandas filarmónicas ponían el toque rítmico y tradicional, provocando el espíritu danzante de quienes pagaban promesas y quienes acompañaban la imagen principal del Santo y las otras réplicas que se cargaban con la misma devoción.

En esta ocasión la imagen principal de San Francisco de Asís no fue girada frente a los estudios de Radio Camoapa, como tradicionalmente ha ocurrido desde el año dos mil cuatro, pese al visible intento realizado por uno de los cargadores de la peaña. Este episodio no disminuyo el esfuerzo del personal de la radio que animaba vigorosamente a la multitud, incluyendo a su director Juan Carlos Duarte Sequeira, quien había preparado un especial saludo para el seráfico de Asís.

La señora Isabel López, popularmente conocida como La Chabelona, se mostro emocionada por el desborde de la población que acompañaba a San Francisco en su tradicional tope en el recorrido tampoco podía faltar Gilberto Guevara, quien ha continuado una tradición familiar de bailar a San Francisco de Asís, portando un disfraz, cuyo concepto cambia cada año y en esta ocasión representaba a un payaso que caminaba al revés cabeza abajo y los pies hacia arriba.

Pasada las 5 de la tarde, la imagen principal de San Francisco de Asís y las otras que le acompañaban ingreso al templo parroquial dedicado en su nombre, en medio de aplausos y pañuelos blancos ondeando en toda la nave central de la iglesia. Este martes cuatro de octubre es el día principal de la fiesta patronal, previéndose la misa solemne a las diez de la mañana y una vez concluida, la imagen de San Francisco de Asís vuelve a recorrer las calles de la ciudad con mayor devoción.