Cuantiosas pérdidas económicas dejó un incendio en dos viviendas ubicadas en los alrededores del cementerio de Acoyapa-Chontales, donde se encontraba Aleyda Mena Sevilla y la otra propiedad de Everth Sevilla Aguilar. Los vecinos ante la emergencia se unieron junto a los Bomberos Unidos para controlar el siniestro que amenazaba con extenderse por el sector.
El incendio fue provocado por el recalentamiento de un abanico. En la vivienda se encontraban dos niños y tres adultos. Al ver las llamas comenzaron a sacar, lo que les permitió la emergencia. Posterior, llegaron al lugar los Bomberos de Acoyapa que trabajaron fuerte junto a la Brigada Municipal hasta que el fuego se controló.
En la primera vivienda, propiedad de José Noel Sevilla Aguilar, el fuego arrasó con un abanico, una refrigeradora, una pantalla. También, tres camas de madera y una lavadora, ropa y enseres domésticos.
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En el segundo inmueble de Everth Sevilla Aguilar, las llamas incineraron: dos motos, una bicicleta, una computadora y dos refrigeradoras, para un total de lo afectado de 250 mil córdobas aproximadamente.
El incendio fue controlado con dos cisternas
Las viviendas estaban convertidas en un averno, pero el trabajo de sofocarlo fue reforzado por una cisterna de la estación de Bomberos de Santo Tomás. También otra de la alcaldía de la llamada “Sucursal del Cielo”, más el apoyo de los pobladores del barrio que trabajaron sin cesar hasta que todo quedó apagado.
En sus declaraciones, la alcaldesa de Acoyapa, ingeniera Nelly García, calificó lo ocurrido como una tragedia, luego que el voraz incendio arrasara con las dos viviendas. “Gracias a Dios no hay pérdidas humanas, pero sí hay afectaciones materiales que se pueden reponer. Como autoridad vamos a platicar con los dueños de las viviendas para ver en qué les podemos ayudar”, dijo la autoridad municipal.
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De acuerdo a la información, el incendio quedó controlado a eso de las 4:50 de la tarde del sábado 24 de febrero. Posterior, los Bomberos Unidos de Acoyapa, procedieron a realizar las investigaciones. Determinaron, que el siniestro fue de origen eléctrico, debido al recalentamiento de la masa de un abanico, que estaba en la parte sur del inmueble.