
Juana Virgenza Sotelo López, es una maestra que durante más de treinta y dos años brindó la enseñanza a muchas generaciones de Camoapa. Jóvenes en la actualidad la reconocen como la persona que les dio la oportunidad del saber. La profesora Virgenza antes de integrarse de lleno al magisterio, tuvo varios oficios, pero siempre supo que ese era su camino.
La maestra Sotelo, quien ahora tiene 81 años de edad, recuerda su infancia como una fase tranquila, llena de amor por parte de sus bisabuelos, quienes la criaron, así como del cariño de todos sus tíos, que le aseguraron parte de su formación. Fue una niña criada bajo los valores cristianos y es algo que permanece hasta la actualidad en su vida.
Lea más: Una vida dedicada a la vocación de la enseñanza en Camoapa
La profesora Virgenza, afirma que desde muy joven tuvo el deseo de prepararse, recuerda que día un señor, aparentemente de origen mexicano, le enseñó a cocer con aguja mágica. “Aprendí mecanografía y costura en la escuela de doña Yolanda Arróliga, siempre me sentí inquieta por aprender algo, me gustaba y mis tíos siempre me apoyaron”, enfatizó la docente.
La maestra contó, que su inserción en la educación inició en el año de 1972, cuando el padre Alejandro Bolaños, le solicitó, le ayudara con los estudiantes en el colegio y así comenzó de manera empírica. “Yo obtengo mi licenciatura de ciencias sociales, pues los sábados íbamos a nuestras clases y durante las semanas veníamos a dar clases, ahí en el colegio duré treinta y dos años como docente y subdirectora”, explicó la maestra Virgenza.
Recuerdos de la profesora Myriam Aragón de la labor educativa de Virgenza Sotelo
La profesora Myriam Aragón, fue compañera de trabajo y también directora de la maestra Virgenza Sotelo, en la escuela de comercio. Afirma que tiene gratos recuerdos de su entrañable amiga.
“Es un ser humano extraordinario, bien entregada a su trabajo, era súper especial a la hora de impartir sus clases, se miraba que le gustaba enseñar. Yo recuerdo cuando le dije que me viniera ayudar a la escuela de comercio, no dudó, siempre tendrá mi cariño y aprecio”, aseveró.

La profesora Virgenza Sotelo, se muestra satisfecha por todo el trabajo que ha realizado en su vida. “Yo me siento bien, con mi trabajo, siempre traté de hacer mi labor con amor, con dedicación, que mis alumnos fueran los mejores y me alegra que muchos de ellos aún recuerden mis lecciones”, aseveró.
Puede interesarle: Partera de generaciones en Camoapa comparte su historia
En la actualidad, la profesora Virgenza Sotelo, continúa impartiendo clases particulares en su casa de habitación y afirma que no dejará su profesión por dos factores, el tema económico y además porque los padres y madres de familia se lo solicitan siempre.