Las vacunas contra la COVID-19 podrían haber salvado la vida de 234.000 estadounidenses no vacunados que han muerto desde junio pasado a causa de la enfermedad, según un nuevo estudio de la Fundación Kaiser Family.
La investigación sugiere que casi una cuarta parte de todas las muertes por coronavirus en Estados Unidos podrían haberse evitado si más personas hubieran optado por vacunarse.
