
La comunidad camoapeña celebró el aniversario número 63 del Instituto Nacional de Camoapa. Es una institución que desde 1962 ha sido pilar en la formación de generaciones y símbolo del progreso educativo en la región
La mañana del viernes 15 de agosto, el Instituto Nacional de Camoapa conmemoró su fundación con un desfile escolar que llenó de colorido y música las calles de la ciudad. Participaron estudiantes de secundaria, bandas rítmicas de escuelas invitadas y la comunidad en general.
Al finalizar el recorrido, se realizó un acto solemne en el que estuvieron presentes ex docentes, directores, exalumnos y autoridades del Ministerio de Educación. Durante la ceremonia se recordó la importancia de esta institución como uno de los mayores logros educativos de Camoapa.
El evento cerró el sábado 16 de agosto con el tradicional carnaval estudiantil, que se ha convertido en una de las celebraciones más esperadas por la juventud camoapeña.
Proyecto de ampliación del instituto sigue pendiente
En el acto oficial, representantes del Ministerio de Educación confirmaron que continúa en pie el proyecto de construcción de una segunda planta en el pabellón principal. La obra fue anunciada hace cuatro años, pero aún no se concreta.
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El exdirector Orlando Salazar señaló que hablar del Instituto Nacional de Camoapa es reconocer también el desarrollo del municipio en lo educativo, social y económico. Recordó que la institución inició sin edificio propio, y que gracias a la donación de un terreno fue posible levantar el primer pabellón.
“Hoy toca a la nueva comunidad educativa seguir trabajando por la calidad, porque la educación es la base del futuro de nuestro municipio”, afirmó Salazar.
Palabras de la actual dirección
La directora actual, profesora Karen Bonilla, destacó durante el acto que el centro se ha consolidado en competencias académicas y deportivas. Indicó que se han logrado primeros lugares a nivel departamental y nacional.
También reconoció que, aunque hay retos pendientes, los resultados de aprendizaje han sido positivos gracias al esfuerzo de docentes y estudiantes.
“Este día queremos recordar a esos hombres y mujeres que con determinación fundaron este centro, pero también agradecer a quienes hoy siguen construyendo su historia”, expresó Bonilla en su discurso.
Breve biografía del Instituto Nacional de Camoapa
El Instituto Nacional de Camoapa nació de un sueño colectivo. El 22 de mayo de 1962, un grupo de visionarios liderados por el doctor Manuel Salvador Guadamuz González (Q.E.P.D.) y acompañado por familias y docentes locales, se reunió para impulsar la creación de un centro de educación secundaria en el municipio.
En aquel entonces, quienes deseaban continuar sus estudios debían viajar a Managua, Granada, Boaco o Juigalpa, lo que limitaba las oportunidades de muchos jóvenes. Esa realidad generaba desigualdades y limitaba las oportunidades de la juventud camoapeña.
Con el apoyo del Dr. Salvador Guadamuz y el Club Juvenil de Camoapa, se iniciaron las gestiones. Lograron que el Ministerio de Educación aprobara oficialmente la creación del instituto el 17 de agosto de 1962.
Primeros pasos y dificultades
Las primeras clases se impartieron en una casa alquilada, y muchos estudiantes debían llevar pupitres y sillas desde sus hogares. Pese a las carencias, el entusiasmo y la fe en el proyecto mantuvieron vivo el sueño. Poco después, la comunidad logró la donación de un terreno por parte de doña Lidia Rayo, viuda de Martínez, donde se construyó el primer pabellón.
La primera donación comprendía cuatro manzanas y noventa varas cuadradas, con linderos que colindan al oriente con el cementerio local, al occidente con la carretera hacia Comalapa y al norte y sur con remanentes de su propiedad.
Tiempo después, la benefactora amplió su acto solidario donando en total seis manzanas de tierra. De esta manera se consolidó el espacio necesario para el desarrollo del Instituto Nacional de Camoapa y su crecimiento a lo largo de los años.
Gracias a este aporte visionario, miles de generaciones de jóvenes han tenido la oportunidad de formarse en un ambiente educativo inclusivo, reafirmando la importancia de este centro de estudios como referente académico en el municipio.
En 1967 se celebró la primera promoción de bachilleres, un hito que abrió las puertas a nuevas oportunidades para los jóvenes del municipio.
Fundación del instituto, apoyada por la comunidad
El libro “Memorias que perduran… 50 Años Dorados”, publicado en el marco de la celebración del 50 aniversario del Instituto Nacional de Camoapa, recoge la historia viva de una comunidad que trabajó unida para hacer realidad este centro de estudios. En sus páginas se resalta el esfuerzo colectivo de madres y padres de familia, docentes visionarios y estudiantes comprometidos, quienes asumieron el reto de construir un espacio digno para la educación.
Para dar los primeros pasos, se conformó una directiva provisional que tomó la responsabilidad de gestionar los permisos necesarios y garantizar los recursos iniciales. Gracias a su liderazgo y al entusiasmo de toda la comunidad, se sentaron las bases de lo que hoy es una institución educativa de referencia en la región.
El Doctor Manuel Salvador Guadamuz, junto a figuras como don José Sequeira, doña Salvadora Moncada de Cerna y el profesor Manuel Medrano, encabezaron el esfuerzo colectivo. Con recursos limitados y gran sacrificio, levantaron las primeras aulas y formaron a las primeras generaciones.
Instituto Nacional de Camoapa Manuel Salvador Guadamuz González: motor de progreso
Hoy, con más de seis décadas de existencia, el instituto sigue siendo un referente educativo en Boaco y en Nicaragua. Miles de jóvenes han egresado de sus aulas para convertirse en docentes, médicos, ingenieros, líderes comunitarios y profesionales en diversas áreas.
El Instituto Nacional de Camoapa Manuel Salvador Guadamuz González, ha demostrado que la educación transforma sociedades. Su lema, “Luz, Cultura, Amistad”, continúa inspirando a nuevas generaciones a luchar por sus sueños.
El aniversario 63 no solo fue una fiesta estudiantil, sino también un homenaje a la historia, a sus fundadores y a todas las personas que han trabajado para que esta institución siga siendo un eslabón fundamental en el desarrollo de Camoapa.