
Hoy, 31 de enero, se celebra la solemnidad de San Juan Bosco, un santo cuyo legado educativo y de amor a los jóvenes continúa inspirando a comunidades de todo el mundo
Hoy, 31 de enero, se celebra la solemnidad de San Juan Bosco, conocido como el “padre y maestro de la juventud”. Esta festividad se conmemora en numerosas partes del mundo, especialmente entre las comunidades salesianas, que siguen el legado de este santo que dedicó su vida a la educación y al cuidado de los más necesitados.
San Juan Bosco nació en 1815 en Italia, y desde joven se sintió llamado a ayudar a los niños y jóvenes en situación de riesgo. Fundó la Congregación Salesiana, una organización religiosa que promueve la educación y la formación integral de los jóvenes, con especial énfasis en aquellos que enfrentan adversidades económicas y sociales. Su método educativo, basado en la razón, la religión y el amor, ha sido un modelo que ha perdurado a lo largo de los siglos.
Un día para reflexionar sobre su misión y legado
Este día no solo es una oportunidad para recordar su vida, sino también para reflexionar sobre su obra y cómo sigue influyendo en la educación de millones de jóvenes en el mundo. En las escuelas y centros salesianos, tanto en Italia como en otros países, se organizan celebraciones, misas y actividades para recordar su incansable labor. San Juan Bosco es un ejemplo de entrega y dedicación, un modelo de vida para los educadores de hoy.
“San Juan Bosco dejó un ejemplo claro de lo que significa ser un verdadero educador”, afirma María González, profesora en el Colegio Salesiano de Madrid. “Su legado es muy importante porque nos recuerda que la educación no solo es un proceso intelectual, sino también humano, emocional y espiritual”, concluye González.
La vigencia de su método educativo en el siglo XXI
El sistema educativo de San Juan Bosco, conocido como el “sistema preventivo”, sigue siendo una de las principales características de los centros que llevan su nombre. En lugar de castigos o reprimendas, San Juan Bosco promovió el acompañamiento y el apoyo a los jóvenes, entendiendo sus necesidades y guiándolos con paciencia y amor.
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El método preventivo ha demostrado ser eficaz en contextos educativos contemporáneos. Según un artículo de la revista Educadores al Día, este enfoque se ha integrado en muchos programas de educación de todo el mundo. “El sistema de Don Bosco es tan válido hoy como lo fue en su época. La forma en que se enfoca el respeto y la formación de la persona en su totalidad sigue siendo crucial en la educación actual”, señaló en una entrevista José María Fernández, director de la revista Educadores al Día.
La celebración de San Juan Bosco
En las comunidades salesianas de América Latina, Europa y Asia, las festividades en honor a San Juan Bosco incluyen procesiones, conciertos, charlas y celebraciones litúrgicas. Estos eventos permiten que tanto jóvenes como adultos renueven su compromiso con los valores promovidos por el santo. Las actividades también ofrecen un espacio para que los estudiantes compartan sus experiencias y agradecimientos por la educación recibida en los centros salesianos.
En Argentina, el salesiano Padre Luis Alberto, rector de la Universidad Salesiana de Buenos Aires, destacó la relevancia de San Juan Bosco en la vida cotidiana. “Don Bosco tiene un impacto profundo en cada rincón del mundo donde existen salesianos. Su legado de amor y educación sigue vivo, y hoy más que nunca necesitamos de su ejemplo”, expresó en una entrevista publicada por el diario La Nación.
Un mensaje universal para el futuro
A pesar que San Juan Bosco vivió en el siglo XIX, sus enseñanzas siguen siendo una guía para las generaciones actuales. Su mensaje de esperanza y compromiso con los jóvenes en situación de vulnerabilidad se mantiene vigente en la misión de los salesianos y en el trabajo de los educadores de todo el mundo. La solemnidad de hoy, más que una simple celebración religiosa, es una invitación a seguir su ejemplo y a construir un futuro mejor para los jóvenes.
San Juan Bosco fue un verdadero visionario. Su obra trasciende fronteras y religiones, pues su mensaje de amor, educación y compromiso con los más necesitados es un llamado universal para todos aquellos que buscan mejorar la vida de los demás a través de la educación y el acompañamiento.