
Las tormentas y huracanes en 2023 azotaron el territorio nacional, dejando cuantiosas pérdidas materiales, principalmente en la zona del Caribe de Nicaragua. En la Costa, los huracanes prácticamente han arrasado con comunidades, también en el pacífico las fuertes corrientes han dañado severamente y anegado muchas casas.
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La población debe prepararse para lo más fuerte que podría comenzar el próximo mes con la temporada de huracanes. En Managua y otras zonas del territorio de Nicaragua, ya comenzaron a caer algunas lluvias, aunque fueron de poca intensidad.
Muchas calles y cauces se rebalsaron, arrastrando todo lo que encontraban a su paso. Por lo que no es menos importante que la población se prepare para lo más fuerte que podría comenzar el próximo mes, reportó el portal digital Darío Medios.
Huracanes afectarán el Caribe y países centroamericanos
Se prevé que para los primeros días de junio comience la temporada de huracanes, cuando se proyecten un poco más de 20 tormentas con nombres, así lo habían revelado en marzo pasado, elaborado por el equipo de tiempo y clima tropical de la Universidad Estatal de Colorado de Estados Unidos (CSU, por sus siglas en inglés).
“El equipo de tiempo y clima tropical de CSU predice 23 tormentas con nombre en el Atlántico durante la temporada de huracanes, que se extiende del 1 de junio al 30 de noviembre. De estas, los investigadores pronostican que once se convertirán en huracanes y que cinco alcanzarán fuerza de huracán mayor (Saffir/Simpson Categoría 3-4-5) con vientos sostenidos de 111 millas por hora o más”, sostuvo un informe de la CSU.
La CSU prevé, según su pronóstico, que durante la pretemporada de huracanes pueden desarrollarse en un 66 por ciento de que huracanes mayores afecten el Caribe. Lo que hace vulnerable a las Antillas y a los países centroamericanos, incluido Nicaragua, país que ha sufrido los embates de este tipo de tormentas.
Desarrollo de los huracanes
El desarrollo de huracanes es un proceso complejo que involucra diversas condiciones atmosféricas y oceánicas. Es un proceso impulsado por la interacción entre la atmósfera y los océanos. Comprender las condiciones necesarias para su formación y los factores que influyen en su intensidad es esencial para predecir y prepararse para estos eventos climáticos extremos. A continuación, se describe en detalle cómo se forman estos fenómenos naturales:
1. Condiciones previas para el desarrollo de los huracanes
Agua caliente: Los huracanes se forman sobre océanos tropicales y subtropicales, donde la temperatura del agua es de al menos 26.5 °C (80 °F) hasta una profundidad de unos 50 metros.
Atmósfera inestable: La presencia de una atmósfera inestable con aire caliente y húmedo en la superficie y aire más frío en altitudes más altas es crucial para la formación de tormentas.
Humedad en altura: Se necesita una considerable humedad en los niveles medios de la troposfera (aproximadamente entre 5,000 y 7,500 metros sobre el nivel del mar).
2. Desarrollo inicial
Disturbio tropical: Un área de baja presión conocida como disturbio tropical se desarrolla cuando el aire caliente y húmedo en la superficie del océano se eleva y se enfría, formando nubes y tormentas.
Convección: El aire caliente y húmedo continúa ascendiendo, creando corrientes ascendentes fuertes que promueven el desarrollo de más nubes y tormentas.
3. Formación de la tormenta tropical
Ciclón tropical: Si el disturbio tropical se organiza y las tormentas comienzan a rotar alrededor de un centro de baja presión, se forma un ciclón tropical.
Vientos organizados: Los vientos se organizan en bandas de nubes en espiral alrededor del centro, lo que aumenta la convergencia de aire cálido y húmedo.
4. Fortalecimiento a huracán
Efecto coriolis: Debido a la rotación de la Tierra, el sistema de tormentas comienza a rotar, y esta rotación se intensifica si se encuentra en una región con un significativo efecto Coriolis (generalmente fuera de unos 5 grados de latitud del ecuador).
Desarrollo del ojo: En un huracán bien desarrollado, el centro del ciclón, conocido como el ojo, se forma. Este es un área de bajas presiones donde el aire desciende, creando condiciones relativamente tranquilas y despejadas.
Pared del ojo: Rodeando el ojo está la pared del ojo, una región de tormentas intensas con los vientos más fuertes y la lluvia más intensa.
Clasificación
Depresión tropical: Vientos sostenidos de menos de 62 km/h (38 mph).
Tormenta tropical: Vientos sostenidos de 63-118 km/h (39-73 mph).
Huracán: Vientos sostenidos de al menos 119 km/h (74 mph).
Categorías (Escala de Saffir-Simpson)
**1**: 119-153 km/h (74-95 mph).
**2**: 154-177 km/h (96-110 mph).
**3**: 178-208 km/h (111-129 mph).
**4**: 209-251 km/h (130-156 mph).
**5**: ≥252 km/h (≥157 mph).
Los huracanes pueden causar daños significativos debido a vientos fuertes, marejadas ciclónicas, inundaciones y deslizamientos de tierra. La preparación adecuada, incluidos planes de evacuación y construcción resistente, es crucial para mitigar los efectos de estos fenómenos naturales.