A las once de la mañana de de hoy lunes perdió la vida un niño de diez años al ser arrollado por una camioneta que se salió de la carretera. El hecho ocurrió un par de kilómetros antes de llegar a la ciudad de Juigalpa. El vehículo era conducido por Bayardo Calero, una camioneta Toyota, color blanco, de una cabina, placa M114 977.

De acuerdo al relato del conductor, a eso de las (3) de la madrugada de este lunes 17 de abril salió de Chinandega con dirección a Juigalpa. Al pasar la recta de El Salto, cerró por unos segundos sus ojos, saliéndose de la carpeta de rodamiento. A la orilla de la carretera estaba el niño en su bicicleta y fue arrollado mortalmente.

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Venia normal, pero en realidad vengo cansado porque salí a las (3) y media de Chinandega, pero al acercarme a este lugar por milésimas cerré mis ojos y al abrirlos ya estaba en el arcén. Impacté mortalmente al niño”, contó en la escena de la tragedia el conductor de la camioneta.

La bicicleta del menor quedó convertida en chatarra
La bicicleta del menor quedó convertida en chatarra

Calero es originario de Masaya y reconoció, que no hubo en ningún momento imprudencia por parte del menor. “Yo atropellé al niño cuando (él) estaba fuera de la carretera y ahora debo responder”, declaró Bayardo, al revelar que labora para una institución bancaria.

Muere arrollado y bicicleta destruida

La bicicleta del menor quedó convertida en un ocho y su cuerpecito yacía en medio de un charco de sangre. Mientras sus familiares lloraban sin cesar y enseguida procedieron a tapar el cadáver con una sábana blanca. En el lugar oficiales de tránsito de la Policía de Chontales realizaban las investigaciones correspondientes.

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Una joven que habló con la condición de preservar su identidad, dijo, que el niño estaba fuera de la carretera y el conductor realizó un zigzag y lo arrolló lanzándolo por el aire. Sin embargo, don Bayardo detuvo la marcha de la camioneta cerca del rótulo del puente la Chancha.