
Monseñor Rolando Álvarez pidió a los creyentes orar por las familias desempleadas, por los trabajadores explotados y por quiénes han tomado la terrible opción de la migración forzada. También denunció la “plaga del desempleo”, así como la violación de la dignidad del trabajo debido a que los trabajadores tienen derecho a un salario justo.
En su homilía el religioso señaló que el “trabajo” es antiguo como el hombre y su vida en la tierra. Sin embargo, la iglesia en su misión de servicio ha encontrado innumerables casos de violación de la dignidad del trabajo, es decir la “plaga del desempleo”.
Nuestra sociedad presenta el problema de encontrar un empleo adecuado para toda persona capaz de él, es decir la falta de puestos de trabajo esto se convierte en problema doloroso cuando los afectados son principalmente padres y madres de familia que no tienen como sustentar sus hijos, cuando son jóvenes quienes después de haberse preparado mediante una formación cultural técnica y profesional no logran encontrar un puesto de trabajo” denunció Álvarez.
El líder religioso manifestó que actualmente los empleadores “desprecian” los derechos que fluyen del trabajo, especialmente el derecho al justo salario, a la seguridad del trabajador y de su familia.
Es un grave problema cuando la remuneración por el trabajo ya no es suficiente para mantener dignamente una familia y asegurar su futuro. La justicia se traduce en la actitud determinada por la voluntad de reconocer al otro como persona, una sociedad justa puede ser realizada solamente en el respeto de la dignidad de la persona, el respeto de la dignidad humana”, expresó monseñor Álvarez.