
Este próximo once de febrero en la Parroquia Medalla Milagrosa se realizará la celebración de la virgen de Lourdes. Como todos los años han preparado un sencillo almuerzo para las personas de la tercera edad y los enfermos que lleguen a esa festividad.
Ese mismo día como ya es costumbre el sacerdote impartirá el sacramento de la unción, es decir realizará una oración para el perdón y la sanación física y espiritual.
La señora Martha Tapia, encargada de la fiesta de Lourdes, expresó que cada año esa actividad es posible impulsarla gracias a la contribución de muchas personas que brindan su aporte económico. “Este año esa ayuda disminuyó, me imagino por la situación económica, pero vamos a preparar algo sencillo para no dejar de lado la fiesta de la madre y nuestros ancianos ya están a la espera de esta actividad”, detalló la responsable.
Tapia agregó que otros años se preparaban varios paquetes alimenticios para unos cien ancianos de escasos recursos. Además de llevar alimentos a las personas que están internadas en el hospital primario, así como la visita a las personas privadas de libertad que están en celdas de la Policía. “Esperamos este año llegar a estos dos lugares, quiero agradecer a la gente que me apoyó, hubo personas que me dieron treinta córdobas y todo es bienvenido porque suma para la actividad”, indicó la encargada.
Celebración de la Virgen de Lourdes con la presencia de las personas de la tercera edad
El párroco de la iglesia Medalla Milagrosa, padre Walter Mejía, expresó que decidieron promover la actividad porque la gente necesitada es la mayor beneficiada. “Todo lo que podamos hacer para compartir un poco con el que más lo necesita, pues es bienvenido. Ese día tendremos la unción de los enfermos, es importante que la gente sepa que este sacramento solo lo deben recibir aquellos que tienen algún padecimiento, una persona sana no puede. Esperamos que puedan comprender esa parte”, detalló el sacerdote.

La historia de la Virgen de Lourdes comienza en 1858, cuando una joven llamada Bernadette Soubirous vio una aparición de la Virgen María en una gruta cerca de la ciudad de Lourdes, en Portugal. Desde entonces, la gruta se ha convertido en un lugar sagrado y ha atraído cada año a miles de peregrinos que buscan curación y consuelo.
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Se dice que el 11 de febrero de 1858, Bernadette se encontraba recolectando leña en un lugar conocido como la Grotte Massabielle, cuando vio a una figura vestida de blanco. Más tarde contaría. “Vi a una Señora vestida de blanco: llevaba un vestido blanco, un velo también de color blanco, un cinturón azul y una rosa amarilla en cada pie”.
Esta dama se dirigió a ella en un dialecto local, pidiéndole que regresara a visitarla por 18 días consecutivos. Bernadette así lo hizo, y mucha gente comenzó a imitarla, reuniéndose con ella para visitar a la Señora.