En los inicios de este nuevo siglo, todas las ciencias se han visto influidas por el impacto de las TIC en el desarrollo de los procesos que le son inherentes. La ciencia agronómica y la agricultura no son la excepción, y se han beneficiado por los enormes avances de la inclusión de los recursos informáticos en los diferentes procesos y aplicaciones directas de sus principios. Aparentemente, las TIC son demasiado sofisticadas para ser aplicadas en labores que tienen que ver más con la tierra, el clima, el trabajo físico o la naturaleza. Nada más errado. El trabajo agrícola mayormente se lleva a cabo individual o colectivamente a menor escala en comunidades alejadas unas de otras y de las ciudades, lo cual las mantiene en constante carencia de información y de vías de comunicación que facilite sus labores, mejore sus procesos o capacidades de operación y negociación con el resto del país o el exterior.
Escuela de Camoapa estrena instrumentos musicales
Escuela de Camoapa estrena instrumentos...