La violencia sexual contra niñas y niños es una realidad que se vive a diario en Nicaragua. Algunas organizaciones catalogan el tema como un grave problema de salud pública.
Un estudio de la organización IPAS Centroamérica, una organización que apoya a las mujeres en temas de salud sexual y reproductiva, revela que en la última década, alrededor de unas 16 mil 500 niñas menores de catorce años han dado a luz en Nicaragua en los hospitales públicos. En el año 2016, en Camoapa, de mil mujeres embarazadas 150 eran adolescentes.
Según la licenciada Heysel Varela los abusos sexuales en menores de edad son personas cercanas a las familias.
Cuando la niña o el niño sufre violencia, dejan algunos indicios que deberían ser percibido por los padres y madres de familia.
De enero a abril del año 2017, el sitio web IML reportó 1200 casos de violencia sexual de ese total de ese total 840 eran niñas.