La terminal de buses en Panamá Albrook, amaneció hoy 2 de julio de 2020, invadida por más de mil nicaragüenses, que desde varios días esperan respuesta del Gobierno para retornar al país. Los compatriotas piden les permitan regresar a su tierra, porque se han quedado la mayoría sin trabajo, sin techo y vulnerables a consecuencia de la pandemia COVID-19.
Cansados y con hambre a la espera de respuestas Zamira Gozaine, Directora de Migración les indica que desde el viernes está coordinando su salida, “pero las autoridades de Migración de Nicaragua atrasan el retorno” y Costa Rica no esta permitiendo el paso de los nicas imponiendo normas estrictas que deben cumplirse para darles salida.
El gobierno de Nicaragua, nos ha exigido a nosotros 72 horas de anticipación, que le enviemos el nombre y copia de pasaporte de cada persona para poder certificar que son ciudadanos nicaragüenses y que puedan retornar al país, explica a los nicas con ayuda de un alto parlante Gonzaine.
En grupos de 65 personas por día, saldrán los nicaragüenses. No como habían planificado la noche de ayer 1 de julio, en una caravana de más de 30 buses. Por el momento indica la directora de Migración que los nicas serán trasladados a otro lugar, “para mantenerlos en resguardo mientras se dan los procedimientos para la salida y que no estén a la intemperie.”.
“El ministerio de salud tiene que verificar que todos están en condiciones actas para viajar, si el ministerio de salud no certifica, por ley no se puede permitir el ingreso a los buses por que son ellos lo que deben autorizar los cercos sanitarios en las fronteras.”
Son 1,180 nicaragüenses que se mantienen en esta situación, entre adultos, y menores. Además de la Directora de Migración, este caso también esta siendo atendido por la Gobernadora de Panamá, Judy Meana y el jefe de Fuerza de tarea Conjunta Comisionado Gabriel Arroyavez, indica un comunicado de Migración de Panamá.