Oficialmente el 12 de julio, se suspendieron las fiestas patronales de santo Domingo de Guzmán en Managua. Antes de iniciar la eucaristía ese día el Cardenal Leopoldo Brenes enunció “ante la presencia de la Covid-19 en Nicaragua, como Iglesia, junto al Papa Francisco y los Obispos de la Conferencia Episcopal, reafirmamos una vez más “la vida por encima de todo”.
Con este mensaje la Arquidiócesis suspendió todas las festividades patronales presenciales, invitando a continuar la celebración desde los hogares con la misma fe y devoción, en este tiempo de crisis sanitaria producto de la pandemia. “Evitando procesiones y actividades que promuevan aglomeración de personas”.
A la vez pidieron a los devotos, promesantes y tradicionalistas su comprensión y apoyo evitando su realización debido a las limitaciones que la crisis sanitaria impone, “posponiendo para otro momento oportuno” estas celebraciones.
Por su parte, la alcaldesa de Managua Reyna Rueda, quien durante tres años consecutivos no ha podido ser la mayordoma de las fiestas, el primer año por la crisis sociopolítica y actualmente por la pandemia del Covid-19. Este año la edil capitalina comunicó que las fiestas del Patrono Santo Domingo serán virtuales, a pesar que la alcaldía y otras instituciones gobernamentales han desafiado a la pandemia con un sinnumero de actividades desde que inicio la crisis sanitaria, con el objetivo de mostrar una aparente normalidad.
Las actividades propuestas por la alcaldesa Rueda, es estar conectados en redes sociales, Facebook, Instagram, Twitter, donde propone dar a conocer las tradiciones, “haremos entrevistas en vivo con promesantes, y vamos a realizar concursos donde le pediremos a las familias que compartan fotos de la procesión de santo Domingo de Guzmán, mejores vestimentas que hayan utilizado en procesiones anteriores” a estas actividades se le suma la elección de la india bonita.
La imagen de “Minguito” quedará en la parroquia de la Sierrita, y no hará su tradicional recorrido en los barrios de Managua.
En Managua la tradición es que el alcalde de turno “asuma la mayordomía de las fiestas”, pero desde la crisis sociopolítica en abril 2018 las cosas cambiaron, la iglesia nombro a dos padres como mayordomos, y la alcaldesa y vice alcalde no han sido merecedores de esa distinción religiosa.
Rosario Murillo este pasado 28 de julio en su tradicional comunicado de medio día, notifico que los días 1 y 10 de agosto en el marco de las festividades de santo Domingo de Guzmán serán días feriados de asueto remunerado.